Ingredientes
1/2 taza de avellanas peladas
1/2 taza de aceite vegetal
1 libra de ravioles de calabaza frescos
1 barra de mantequilla sin sal
6 hojas de salvia fresca
Gran pizca de nuez moscada rallada
1/2 taza de parmesano rallado
2 galletas amaretti

Direcciones

- Precaliente el horno a 350 grados F.
- Extienda las avellanas en una bandeja para hornear. Tostar las avellanas en el horno hasta que estén doradas y fragantes, aproximadamente de 5 a 7 minutos. Dejar enfriar por completo. Cortar en trozos gruesos las avellanas enfriadas y reservar.
- En una sartén de 10 o 12 pulgadas con lados altos, hierva 2 cuartos de galón de agua con sal. Agregue el aceite vegetal para evitar que los ravioles se peguen entre sí. Agregue los ravioles y cocine por 4 minutos o hasta que floten hacia arriba. Con un colador de araña, retire cuidadosamente los ravioles en una fuente grande y carpa con papel de aluminio para mantener el calor.
- En una sartén pequeña, derrita la mantequilla. Cuando la mantequilla está chisporroteando y comienza a dorarse, rasga las hojas de salvia en la sartén y fríelas durante unos 20 segundos. Retire del fuego y agregue la nuez moscada. Vierta la salsa de mantequilla sobre los ravioles y espolvoree con avellanas tostadas. Ralla las galletas amaretti sobre el plato y sírvelas de inmediato.